Estación de ferrocarril de Mons Mons, Bélgica. 11 de septiembre de 2011
Después de un año viviendo en Mons, Bélgica, creo que es hora de compartir la experiencia acumulada durante este tiempo. Si viajas a Bélgica y no tienes coche, sin duda la forma más cómoda de moverse entre ciudades y pueblos es en tren.
Sint-Romboutskathedraal Malinas, Bélgica. 29 de abril de 2012
A comienzos de mi Erasmus en Mons, Bélgica, hicimos una excursión a Lier y a Lovaina, dos ciudades flamencas. Recuerdo que, en el trayecto desde Mons a Lier, el tren pasó por una ciudad cuyo panorama dominaba una espectacular torre. Al llegar a casa después de aquél día busqué la ciudad en cuestión para visitarla más adelante, se trataba de Malinas.
Sint-Romboutskathedraal Malinas, Bélgica. 29 de abril de 2012
Como ya expliqué cuando hablé de la Plaza Mayor de Malinas, esta ciudad de la provincia belga de Amberes no tiene un campanario propiamente dicho, de esos tan famosos por esta zona. En su lugar, inscrita en la lista del Patrimonio de la Humanidad como parte de los Campanarios de Bélgica y Norte de Francia, y junto a la Lonja de los Paños (parte más antigua del ayuntamiento), se encuentra la torre de su catedral.
Brusselpoort Malinas, Bélgica. 29 de abril de 2012
La ciudad belga de Malinas estuvo protegida durante muchos siglos por una muralla, como la mayoría de ciudades importantes. La Puerta de Bruselas, Brusselpoort, una de las doce con las que contaba la ciudad, es el único testigo que queda de aquella protección.
Stadhuis van Mechelen, Grote Markt Malinas, Bélgica. 29 de abril de 2012
Todas las ciudades belgas y neerlandesas tienen tres cosas en común, que normalmente se encuentran en el mismo lugar: un ayuntamiento (stadhuis o hôtel de ville, dependiendo de si se habla neerlandés o francés), una plaza mayor (grote markt o grand place), y un campanario (belfort o beffroi).
El caso de la ciudad flamenca de Malinas es excepcional, cuenta con su plaza mayor, y en ella su ayuntamiento, pero, aunque dentro del ayuntamiento se debería encontrar su campanario, éste nunca fué completado.
La procesión de la Santa Sangre de Brujas, Patrimonio cultural inmaterial de la Humanidad
Una de los lugares que más me llamaron la atención la primera vez que visité Brujas en verano de 2010 fue la Basílica de la Santa Sangre. En su interior se guarda una reliquia que contiene la sangre de Jesucristo, un trozo de tela que, según los Evangelios Apócrifos, José de Arimatea conservó al terminar de limpiar el cuerpo de Jesús tras su muerte.
Según la tradición, un cruzado llamado Teodorico de Alsacia trajo la tela de vuelta de Tierra Santa en la Segunda Cruzada (o en la Cuarta, según la versión). En la actualidad se cree que esta reliquia se consiguió más probablemente durante el Asedio de Constantinopla de 1204, ciudad en la que durante algún tiempo también se encontró la Sábana Santa.
Desde el siglo XIII, cada año en la fiesta cristiana del Día de la Ascensión (cuarenta días después del Domingo de Resurrección) se celebra en esta ciudad flamenca el llamado "Día más hermoso de Brujas". Miles de ciudadanos se unen en una procesión que forma parte de la historia y que es considerada por la UNESCO como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad.